ni tan siquiera el reloj pudo acompasar su goteo incesante
con el paso del astro, nada se detuvo, no......
El caso es que todo fue nada y las cosas fueron insustanciales,
la vida no era vida y los cuerpos envases de contenido caducado,
agrio, sin aroma aparente, pero pestilente en su forma.
Hoy se presenta como ayer literal y mañana transcurriráel hoy presente, yo por si acaso eh adelantado mi reloj........cien años.