martes, 22 de junio de 2010

Al este del gallo verde.

Campos de oro y manto verde,
son antesala de tu esencia.
Bien dispuesto un cúmulo de rocas
dan forma a peldaños de tú tierra
en la escalada al firmamento...
Farallón de tu aire y calor de tu gente.

Pinadas con su penetrante aroma resinoso,
abrazan el pulmón del que vuelve y,
el lomo del cachalote perpetuo
reviviendo pisadas en aguas fecundas.

Un diario…. Sujeto a una mano engullida
por dunas migratorias, arenales que besan
los pechos de las gemelas… Arterias de un
placer atesorado.

Mi mente te recorre...
Testigo es el alborozo de la flecha de copete punzante,
alado dardo de canto melodioso, morador altanero.

Mailos descubre la fuerza del sol poniente y la isla,
donde hombres conversos en licántropos despiden al astro,
empujan la brisa esteña que teje redes donde descansar pueda,
El gallo verde….

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